El verano es sinónimo de playa, sol y diversión. Sin embargo, este año, una sombra se cierne sobre nuestras costas: la avispa de mar.
Esta pequeña pero peligrosa criatura marina, casi invisible a simple vista, se ha convertido en la protagonista no deseada en algunas playas españolas, superando en peligrosidad a las conocidas medusas y carabelas portuguesas. ¿Quieres saber por qué?
En las costas españolas, la avispa de mar, también conocida como Carybdea marsupialis y originaria del océano Indo-Pacífico, ha cruzado océanos y ha llegado a nuestras playas para hacerse notar.
Su cuerpo, llamado "umbrella", tiene el tamaño de una pelota de golf y una forma de cubo. De este cubo emergen cuatro tentáculos que pueden alcanzar entre 20 y 30 centímetros de largo, con un aspecto translúcido en tonos blancos y azulados.
Pero no te dejes engañar por su tamaño diminuto: la avispa de mar es el ninja del océano: rápida, pequeña y extremadamente peligrosa. Con su apariencia de cubo de cristal flotante, es increíblemente difícil de detectar hasta que te has encontrado con ella.
A diferencia de las medusas comunes que simplemente flotan con la corriente, esta medusa se mueve con agilidad en el agua, convirtiendo un día de playa en una posible carrera contra el dolor.
La picadura de la avispa de mar es como un pinchazo de fuego: duele muchísimo y deja un picor muy intenso, y suele llenarse de ronchas rojizas. Aunque el dolor es intenso y en casos raros puede causar calambres, vómitos y cansancio extremo, no te preocupes: es muy raro que la picadura sea mortal.
Si has recibido una picadura de avispa de mar, toma nota y sigue estos consejos.
Aunque su distribución puede variar ligeramente de un año a otro debido a factores como las corrientes marinas y la temperatura del agua, se ha visto alguna en el sur y este de España, especialmente en la región mediterránea.
En la Comunidad Valenciana, especialmente en las playas de Alicante y Valencia, la avispa de mar ha estado nadando. En la Región de Murcia, también ha dejado su huella, con algunos avistamientos en el Mar Menor.
La Costa Brava en Cataluña, no ha sido la excepción, y en Andalucía, aunque en menor medida, en las costas de Almería y Granada han visto algunos ejemplares. Por suerte, de momento son muy pocos los ejemplares reportados.
El aumento de avistamientos de la medusa avispa de mar en las costas españolas podría estar relacionado con varios factores ambientales. El calentamiento global y las alteraciones en las corrientes oceánicas están facilitando la migración de esta especie a nuevas áreas.
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— Bondzù (@BondzuCubs) July 2, 2024
Además, la sobrepesca y la disminución de predadores naturales pueden estar contribuyendo a su proliferación.