Los científicos saben, desde hace tiempo, que cierto tipo de auroras se pueden generar en ausencia de tormentas solares, y algunas de ellas ocurren en otoño.
Muchas auroras terrestres tienen su origen en la interacción de las tormentas solares con el campo magnético terrestre. Otras tienen diferentes orígenes, como es el caso de las grietas otoñales del campo magnético terrestre.
Según informa Spaceweathe.com, se están abriendo grietas en el campo magnético de la Tierra. Los investigadores lo llaman el "efecto Russell-Mherron".
El viento solar fluye a través de las grietas para alimentar tormentas geomagnéticas incluso sin el impacto de una eyección de masa coronal. Este hecho ha ocurrido durante la segunda parte de septiembre de 2024, donde varias grietas de este tipo fueron responsables de varios avistamientos de este tipo de aurora.
Algunas auroras generadas en la segunda parte de septiembre de 2024 ocurrieron sin una tormenta solar. El efecto Russell-Mherron se combinó con el viento solar ordinario para provocar el espectáculo.
Aurora (Northern Lights) Tonight?
— Island Codgers (@IslandCodger) September 27, 2024
Could be!
A CME from a big solar flare on 9/22 could graze the earth tonight. Combine that with Autumnal CRACKS IN EARTH'S MAGNETOSPHERE (called the Russell-Mherron effect) increase the chances.
(File Photo. Credit Space Weather) pic.twitter.com/moqdqFfENY
Ahora se están abriendo más "grietas otoñales" y podrían preparar el terreno para auroras aún más brillantes si, como se espera, una eyección de masa coronal roza el campo magnético de la Tierra en los próximos días.
Referencia
C. T. Russell, R. L. Mherron, Semiannual variation of geomagnetic activity. Journal of Geophysical Research, 1 January 1973.