Según la última salida mensual del modelo europeo, junio podría finalizar con un carácter tórrido en cuanto a temperaturas. Aunque las salidas más recientes de los modelos globales de momento no lo contemplan, analizaremos cuales son las posibilidades reales de que se produzca una ola de calor en este mes y como las previsiones a corto plazo indican que el calor volverá a despuntar desde el sur peninsular.
La salida más actualizada del SEAS5 del modelo europeo anticipa un mes
de junio muy cálido o incluso tórrido en gran parte de España. El mapa de anomalía de temperatura muestra la desviación de la temperatura media mensual respecto de la climatología del modelo, para el mes entero. Según este producto, junio acabará por encima de la media en toda España, aunque las anomalías variarán de forma importante según las zonas:
Cabe mencionar que anomalías de hasta 4 ºC sobre una media mensual
implican temperaturas muy por encima de lo que sería habitual, y que podrían suponer un riesgo para la salud.
En cuanto a precipitaciones, el SEAS5 prevé un mes seco en Galicia y vertiente cantábrica oriental, así como en Cataluña. En estas zonas podrían caer hasta 20 l/m2 por debajo de la media. Por el contrario, el mes en curso podría ser húmedo en el Pirineo oscense y Sistema Ibérico. Es probable que las tormentas en estas regiones sean recurrentes y localmente intensas. En el resto de la Península y Baleares, no se observan desviaciones importantes respecto de la media.
La semana del 9 al 16 de junio será cálida o muy cálida en España. Se esperan anomalías de +3 a +6 ºC en todas las zonas de la Península excepto el litoral. En las costas y Baleares, la anomalía será más moderada, oscilando entre 1 y 3 ºC por encima de la media semanal. En Canarias, la anomalía será de apenas 1 ºC en el máximo de los casos, ciñéndose el carácter térmico a la normalidad climatológica.
A principios de la semana que viene, la dorsal subtropical se reforzará sobre la Península. Con ello, esperamos que el calor vuelva a despuntar en los grandes valles fluviales y zonas de meseta. A mitad de semana, el descuelgue de una vaguada en el atlántico, desplazará el calor hacia el área mediterránea.
En resumen, es poco probable que la semana que viene se vaya a producir una ola de calor porque el criterio de duración (3 días como mínimo) no se cumpliría. Aun así, esperamos un episodio de temperaturas muy altas con riesgo en algunas comunidades.