Sin duda revolucionó la forma de usar la sartén, más aún, revolucionó la forma de cocinar. Conozcamos un poco más a fondo este compuesto. Químicamente se trata de politetrafluoroetileno, pero todos los conocemos por su nombre comercial: “teflón”.
Este material fue patentado en 1938 pero fue en los años 70 cuando se comenzó a utilizar de forma masiva. A ver, era lógico, estábamos frente al mejor antiadherente conocido. Esa terrible sensación de frustración que sentíamos cuando algo se pegaba se esfumaba rápidamente. Quién no querría tenerlo en su casa.
Eso sí, se trataba de un material que estaría en o con los alimentos, así que, como se hace en todos, se debía estudiar si algún componente tóxico podría migrar a los alimentos y contaminarlo.
¡El politetrafluoroetileno, más conocido como Teflon, tiene un coeficiente de fricción tan bajo que ni siquiera un gecko puede trepar por una superficie recubierta de este material! Por eso se usa tanto en revestimientos antiadherentes pic.twitter.com/Biqkt1LuAl
— Alejandro Navarro Yáñez (@Alexny_85) March 17, 2023
Los resultados no se hicieron esperar: el material es estable e inerte. Grandísima noticia. Eso, sí, debería utilizarse teniendo en cuenta que no puede calentarse por encima de 300 ºC para evitar que se desprendan gases tóxicos. Nos quedamos tranquilos entonces, cocinar por encima de 300 ºC no es recomendable por muchos motivos, y lo más peligroso no sería el teflón.
En este momento de emoción quedaría empañado rápidamente por una realidad cruel. Imagina tener que conseguir que el mayor antiadherente se adhiera a los materiales de la sartén... o de cualquier sitio.
El PFOA (ácido perfluoroctanoico) fue la solución. Un regalo envenenado ya que no era biodegradable, tremendamente contaminante y que hay que evitar en los alimentos. El riesgo es mínimo en estos últimos, porque no está en o con ellos si la sartén está íntegra, pero, por precaución, la UE prohibió su uso desde 2020 (aunque desde 2012 ya no se utilizaba).
Actualmente la variedad de sartenes es amplísima. Entre ellas, podemos encontrar las de titanio, que, si bien son caras, también son muy duraderas. En realidad son de aluminio, pero la capa antiadherente está reforzada con titanio.
Últimamente están ganando peso, y nunca mejor dicho, porque pesan una barbaridad, las sartenes de hierro. No tienen esa capa antiadherente, pero si las cuidas bien y le coges el truco, tus platos quedarán exquisitos. Eso sí, cuidado con que se oxide, sécalo bien o la daremos por perdida.
Otra de las clásicas no antiadherente es la sartén de acero inoxidable. Es el material preferido por cocineros profesionales junto con las de hierro y ya ves, ni gota de teflón.
Uno de los motivos por los que a los profesionales no les gusta esta capacidad antiadherente es porque consideran que se libera más jugo y el tostado es más complicado, así que la carne o el pescado parecen más cocidos que tostados.
El peligro del sartén Teflón.
— Somos Cosmos (@InformaCosmos) April 18, 2023
Las sartenes antiadherentes podrían estar liberando millones de microplásticos mientras los s preparan sus alimentos.
Un estudio afirma que una sola grieta en la superficie de una sartén recubierta de teflón podría liberar unas 9.100 pic.twitter.com/iENtkX58bd
Si queremos cocinar con este tipo de sartenes algunos productos (no neguemos los beneficios de un antiadherente en un huevo frito o alimentos parecidos), tendríamos que atemperar el alimento primero. Unos 10 segundos, a veces menos, en el microondas, será suficiente (evita que sea a temperatura ambiente).
En el caso del pescado, por ejemplo, utilicemos papel de cocina que absorba la humedad, así conseguiremos una piel más crujiente que conserve los jugos del pescado.
Por último, dejemos de temer al aceite, no pasa nada por añadirlo antes de cocinar, el aceite de orujo de oliva es la mejor opción. Eso sí, no lo calientes a la vez que la sartén. Primero se calienta la sartén y cuando esté bien caliente, añadimos el aceite y un poco después, lo que vayamos a cocinar.
Así que no, no es imprescindible cocinar con sartenes antiadherentes, pero hay algo que sí lo es: conservar en buen estado nuestros sartenes. Si no están íntegras, tienen golpes o abolladuras es mejor retirarlas ya que el material que está demostrado que es inocuo para el o con alimentos es el único que debe estar en o con alimentos. Las capas inferiores, no.
Si quieres que tu sartén siga en perfectas condiciones durante mucho tiempo, y que sea fiable en todos los sentidos, te recomendamos encarecidamente estos consejos.