Un estudio reciente publicado en el Journal of Exposure Science and Environmental Epidemiology analiza la exposición generalizada de los seres humanos a sustancias químicas que entran en o con los alimentos (FCC).
Estas sustancias migran a los alimentos y, a través de ellos, al cuerpo humano. Este estudio ha detectado miles de FCCs en humanos, algunas de ellas altamente preocupantes por sus propiedades tóxicas y su relación con problemas de salud pública.
Los FCCs se encuentran en plásticos, papeles, cerámicas y otros materiales empleados en la conservación y transporte de alimentos. Estas sustancias, que superan las 14.000 identificadas, incluyen compuestos conocidos por causar efectos adversos, como alteraciones hormonales, daño celular y potenciales riesgos cancerígenos.
Begin to detox your kitchen from harsh chemicals with a few simple swaps
— Barbara Oneill (@BarbaraOneillAU) October 2, 2024
Aluminum foil can leach aluminum into food when heated and enhance free-radical production in the body which leads to GI inflammation & inhibited enzyme production. Exposure to aluminum has also pic.twitter.com/lo7Net1bUu
Los autores compararon estos 14.000 FCCs conocidos con datos de cinco programas de biomonitoreo humano, tres bases de datos de metabolomas/exposomas y la literatura científica. Esto reveló la evidencia de 3.601 FCCs presentes en humanos, lo que representa el 25% de los FCC conocidos.
A pesar de su extensión, un alto porcentaje no ha sido evaluado completamente en cuanto a su nivel de toxicidad. De hecho, los expertos han alertado de grandes lagunas en los datos de biomonitoreo y toxicidad.
La migración ocurre cuando las sustancias químicas de los materiales de o se transfieren al alimento debido a factores como calor, humedad o almacenamiento prolongado.
Una vez ingeridas, estas sustancias pueden acumularse en tejidos y órganos, siendo detectadas en sangre, orina y otros fluidos corporales.
Estas pequeñas partículas tienen un impacto indirecto y a su vez directo sobre los seres humanos como consecuencia en la alimentación de nuestro día a día.
A brand new study in @Nature @JExpSciEnvEpi finds that of 14,000 food chemicals found in plastic packaging, 3,601 have been detected in the human body. These include 80 chemicals with known serious hazardous properties. Lets break it down 1/5 pic.twitter.com/8z9eKsDTM5
— Jonathan Slotkin, MD (@slotkinjr) September 17, 2024
La reducción de FCCs en los envases abre un mundo a las investigaciones, como las realizadas por el equipo de la Tokyo University of Science, subrayan la necesidad de regular y limitar las sustancias peligrosas en materiales de o con alimentos.
Esto incluye el desarrollo de alternativas seguras y biodegradables. Biomonitorización y políticas públicas. Los resultados de estudios biomonitorizados son cruciales para identificar los FCCs prioritarios y establecer estrategias de mitigación.
Por otra parte, el a herramientas interactivas, como el “FCChumon Dashboard,” permite a los responsables políticos y la industria tomar decisiones más seguras y transparentes.
Geueke, B., Parkinson, L.V., Groh, K.J. et al. Evidence for widespread human exposure to food chemicals. J Expo Sci Environ Epidemiol (2024). https://doi.org/10.1038/s41370-024-00718-2.